Matinal News Noticias al Instante
LAREDO, TX.- Por orden del Gobernador de Texas Greg Abbott, este viernes fueron cerrados los bares como una medida de emergencia para tratar de frenar la pandemia del COVID 19 que ha dejado cifras récord a nivel estatal así como en Laredo.
“Esta acción nos ayudará mucho a reducir los riesgos de infecciones pues desde que abrieron los bares los casos se dispararon de manera alarmante”, dijo el Doctor Víctor Treviño, Autoridad Médica en Laredo.
Los bares abrieron a fines de mayo, en el fin de semana festivo del Memorial Day, gracias a una orden del propio Gobernador Greg Abbott en un intento por reabrir la economía del estado ante la crisis provocada por el cierre de negocios desde el mes de marzo por el COVID 19.
Sin embargo, la medida en lugar de ayudar perjudicó pues el número de infecciones comenzó a subir al grado de imponer el jueves una cifra récord de casos en un día en el estado de Texas con 5 mil 596, mientras hace 10 días el promedio era de mil 250 casos diarios.
En Laredo la pandemia parecía estar bajo control en mayo pero luego de la apertura de bares a fines del mes, en junio los casos positivos comenzaron a subir y del 17 de junio al día de ayer, se contabilizaron 409 nuevos contagios con un récord de 111 casos en un solo día.
El alcalde Pete Sáenz se congratuló del cierre de los bares porque permitirá ejercer mejores acciones de mitigación para frenar el avance del virus.
“No sólo llegó el cierre de bares también vamos a discutir la posibilidad de regresar con el toque de queda para adultos ya que definitivamente el nuevo brote que tenemos ha sido muy crítico”, afirmó el funcionario.
El Doctor Treviño dijo que en redes sociales se podían ver los bares llenos sin que las personas trajeran cubre bocas y sin respetar la distancia social, situaciones que provocaron un pico inusitado de nuevos contagios en la ciudad.
La situación es tan grave que Laredo está en máxima alerta en el nivel cuatro con color rojo y los hospitales tienen saturadas las unidades de cuidados intensivos.
Joe Baeza, vocero del Departamento de Policía, dijo que los oficiales de la ley revisarán especialmente en las noches para verificar que los bares estén cerrados y no se viole la orden nueva del Gobernador de Texas.
La medida del cierre aplica también para los restaurantes que venden alcohol y en sus permisos se estableció que un 51 por ciento de sus ventas provienen de las bebidas embriagantes.
La orden del Gobernador Abbott indicó además que a partir del lunes 29 los restaurantes deberán reducir la capacidad de sus comedores a un 50 por ciento en lugar del 75 por ciento que se les permite ahora.
