Kinshasa, Congo.- El número de casos confirmados en un nuevo brote del ébola en el Congo llegó a 13, incluidos tres fallecimientos, informó el sábado el ministerio de salud.
La Organización Mundial de la Salud ha advertido que este nuevo brote del letal virus en la provincia de Kivu del Norte representa un reto especial, ya que la región es una “zona de guerra” con varios grupos armados activos y miles de personas desplazadas.
La cercana ciudad de Beni y las transitadas fronteras con Uganda y Ruanda también complican los esfuerzos por controlar la enfermedad, que se contagia a través de los líquidos corporales de los infectados, incluidos los muertos.
Congo anunció el brote más reciente el miércoles con cuatro casos confirmados, una semana después de declarar el fin de un brote previo en el noroeste con 33 muertes.
Se desconoce si el nuevo brote, surgido a más de 2 mil 500 kilómetros de distancia, está relacionado.
El ministerio dijo que en el nuevo brote hay 30 casos probables, así como 33 casos sospechosos en investigación, y ya se efectúan las pruebas de laboratorio. En total han fallecido 33 individuos, agregó.
La rápida vacunación de más de 3 mil 300 personas ayudó a contener el brote anterior, y la OMS ha dicho que prevé saber pronto si la vacuna es efectiva contra la cepa de ébola en este nuevo brote.
El director de emergencias de la OMS ha dicho que 3 mil dosis de vacunas continúan en la capital del Congo, adonde fueron enviadas con motivo del brote anterior. La OMS puede movilizar 300 mil dosis más “en un plazo muy breve”, dijo el viernes el doctor Peter Salama.
El ministerio de Salud del Congo dijo que las vacunas serían trasladadas de Kinshasa a Beni en cuanto se establezca la “cadena fría” para mantenerlas a una temperatura óptima de 70 grados Celsius bajo cero (-94 Fahrenheit).
El Congo ha enfrentado el ébola durante décadas y éste es el décimo brote del virus. El ébola, identificado por primera vez en 1976 en el país, es transmitido al hombre por otros animales, incluidos los murciélagos y los monos. No hay un tratamiento específico y el virus puede ser fatal en 90% de los casos, según la cepa.
La OMS ha dicho que el “suceso destacado” en el nuevo brote fue la muerte de una mujer de 65 años que fue internada en un hospital en la aldea de Mangina.
“Fue sepultada, creemos, de una manera insegura para lo que debe hacerse en un caso de ébola, y siete fallecimientos afectaron después a la familia inmediata de la mujer”, declaró Salama.
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