Kiev.- Gareth Bale robó el protagonismo destinado en la final de Champions a Cristiano Ronaldo o Mohamed Salah. Con un doblete y sobre todo un bello gol de chilena, el galés ofreció al Real Madrid su decimotercer título, tercero consecutivo, en la victoria por 3-1 sobre el Liverpool, este sábado en Kiev.
Zidane había decidido dejar a Bale en el banquillo y colocar a Isco en su lugar, acompañando a Karim Benzema y Cristiano Ronaldo.
Pero el galés, que había entrado tres minutos antes en sustitución de Isco, logró el gol de la victoria en el 64, volando y rematando de espaldas a la portería un centro de Marcelo desde la izquierda.
Bale se disfrazó de Cristiano Ronaldo, con un gol de fantasía, que será comparado con el tanto de volea de Zinedine Zidane que dio la novena Champions al Real Madrid en 2002 en Glasgow.
Antes había adelantado al Real Madrid el francés Karim Benzema (51), en un tanto de pillo, en que puso el pie para cortar un centro del portero Loris Karius, con tanta fortuna para el francés, que interceptó el pase y el balón entró mansamente en la portería vacía.
El Liverpool, que había hecho una magnífica primera parte, pero que parecía hundido tras la pérdida por lesión en un hombro de su estrella, el delantero Mohamed Salah en el minuto 30, logró empatar en el 55, con un gol de Sadio Mané.
Tras un cabezazo de Dejan Lovren a la salida de un córner, el senegalés se anticipó a Keylor Navas en su salida, logrando marcar el único tanto del Liverpool.