Moscú.- El director de la NASA expresó el martes la certeza de que los investigadores descubrirán la causa de un misterioso agujero que apareció en la Estación Espacial Internacional y que según su contraparte ruso fue abierto intencionalmente.
El administrador de la agencia espacial estadounidense, Jim Bridenstine, agregó que la colaboración con la Roscosmos rusa sigue siendo importante a pesar de declaraciones recientes de su titular, Dmitry Rogozin, de que Rusia no aceptará un “papel secundario” en el plan de construir una estación cerca de la Luna.
El agujero que apareció en una cápsula rusa Soyuz anclada en la EEI provocó una pérdida de presión en agosto, hasta que se colocó un parche. El incidente provocó rumores y consternación.
“Creo firmemente que hallaremos la respuesta correcta a lo que causó el agujero en la Estación Espacial Internacional y que juntos continuaremos nuestra fuerte colaboración”, dijo Bridenstine.
“Tenemos que permitir serenamente que prosiga la investigación sin conjeturas, sin rumores, sin insultos y sin conspiraciones”.
Aunque Estados Unidos está buscando lanzamientos comerciales a la EEI, Rusia no debería sentirse marginada, dijo.
“Llegará el día en que tendremos nuestro propio acceso a la Estación Espacial Internacional a través de una tripulación comercial. Quiero decirlo muy claramente: esto no es un reemplazo de las capacidades de la Soyuz rusa (…). Queremos asegurarnos de que incluso cuando esté funcionando una tripulación comercial, seguiremos lanzando astronautas estadounidenses en cohetes Soyuz y nos encantaría tener cosmonautas rusos en el lanzamientos de cohetes comerciales en Estados Unidos”, dijo Bridenstine.
Con respecto al proyecto Gateway encabezado por la NASA, de colocar una estación en la órbita lunar, Rogozin dijo recientemente que Rusia no podía darse el lujo de tener un papel secundario en los proyectos de otros países, pero Bridenstine dijo que la participación internacional era crucial.
Bridenstine se reunió con Rogozin en Moscú el martes. Ambos asistirán el jueves al lanzamiento de una cápsula tripulada a la EEI desde el cosmódromo de Baikonur, en Kazajistán.